En 1971, el niño despertó sobre una colina en ruinas y miró al horizonte. Aquella mirada conecta con la que ahora le devuelve su ser mayor en el cincuentenario de aquel año de descubrimiento.
memoria
LA VOZ Y LA MONTAÑA
De repente, en el aparcamiento del puerto, reconozco los ojos pintados de la mujer argentina, sí, la de la voz envolvente. Viene sola. Su amiga no está con ella. Surgen de la semioscuridad del atardecer al volante de su coche. Me pilla agotado, recomponiéndome aún del susto de allá arriba. Hace unas horas, coincidimos en … Sigue leyendo LA VOZ Y LA MONTAÑA