(Con permiso de Luis Landero) No estaba preparado, ni de lejos, para leer «Groovy» a los 14 años, cuando lo compré en la feria del libro de 1973, la misma edad en que creí que podría escribir una novela, solo porque había un concurso al que enviarla. Tenía razón mi padre. También en esto. Alguien … Sigue leyendo LECTURAS DE LA EDAD TARDÍA